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¿Cómo evitar la ‘melancolía’ postvacacional?

Despedimos agosto, las vacaciones llegan a su fin y, con septiembre, regresa la vuelta al trabajo. Han sido unos días de descanso que, este año en especial, necesitábamos más que nunca, pero todo lo bueno se acaba, y pronto.

A todo el mundo nos cuesta retomar las rutinas y, a pesar de ser algo completamente normal, podemos tomar ciertas precauciones para que la ‘melancolía’ que nos aturde tras las vacaciones (a nosotros no nos gusta llamarle depresión, son palabras mayores), no nos golpee con fuerza.

¡Aquí van algunos consejos!

1. Pon en marcha tu cuerpo y reinicia tu mente

  • Planea tu regreso unos días antes. Es importante no volver de vacaciones el día antes de empezar a trabajar. Puede parecer que aprovechamos más el tiempo, sin embargo, el impacto de la reincorporación también será mucho mayor.

  • Normaliza tu horario. Es recomendable empezar a levantarse temprano unos días antes para que podamos ir habituándonos al ritmo normal.

  • Recupera tus hábitos alimentarios y haz deporte. El ejercicio tiene un gran poder relajante y estimulador del estado de ánimo. Ante la tristeza de volver al trabajo, ¡una dosis extra de endorfinas no nos vendrá mal!.

  • Evita el alcohol y la cafeína, ya que pueden incrementar la ansiedad y la depresión.

  • Respeta las horas de sueño. Descansar es fundamental para encontrarse bien; debemos dormir el tiempo necesario y no hacer sobreesfuerzos innecesarios.

2. Retoma el interés por el trabajo y pon en marcha tu lado profesional

  • Marca los objetivos del nuevo curso y plantéate nuevos retos e ilusiones. Busca nuevos horizontes y la manera de evaluar tu evolución para afrontar esta etapa con energía.

  • Comienza poniéndote al día de lo que ha sucedido en tu ausencia, revisa los correos, noticias sobre tu sector, asuntos pendientes y dónde se encuentra todo el material que tendrás que utilizar en los próximos días. La organización previa te ayudará a ser más productivo.

  • Realiza alguna llamada breve a tu red más próxima para que te pongan al día de lo que te vas a encontrar a tu regreso. Reducir la incertidumbre ayuda a evitar el estrés.

  • Descarta los pensamientos recurrentes, acepta tus emociones y escribe lo que sientes. Obsesionarse con cosas que no podemos solucionar solo servirá para generarnos más estrés. Debemos ser capaces de detectar este tipo de comportamientos y rechazarlos, para eso viene bien escribirlos en un papel y luego romperlo…¡Es liberador! .

  • ¡Cuidado con las exigencias! Debemos evitar cargarnos de tareas nada más llegar. Tomarse las cosas con calma ayudará a evitar la depresión postvacacional.

3. Y por último, no te olvides de ver el lado positivo de tu regreso, ¡sólo hay que saber encontrarlo!

  • Reencontrarse con compañeros o volver a actividades placenteras del día a día, como pasear o leer, puede ser un estímulo para hacer tu vuelta menos tediosa.

Así que ya sabéis, mucha calma y atención a lo nos sucede. Si los síntomas persisten, consulta a un profesional, puede que seas víctima de la ergofobia, o miedo al trabajo, un trastorno patológico que hace que la persona experimente pavor ante la simple idea de acudir a su puesto laboral.

Sinceramente, desde Misuqui esperamos que vuestra reincorporación sea tranquila y paulatina. ¿Ya habéis comenzado a trabajar? ¿cómo lleváis el regreso?

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— Mireia Suárez, August 30th, 2021

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